Así como existe violencia en la familia o entre los amigos, el uso de la violencia por parte de los docentes ha venido creciendo en estos últimos años. En el jardín o colegio, el niño(a) pasa casi la mitad de su tiempo, teniendo dichas instituciones una gran influencia sobre su comportamiento y determina muchas veces el carácter y el tipo de persona que será. Los docentes son muchas veces guías y determinan dichas actitudes y características, ante el uso de la violencia, puede afectar sicológica y físicamente a la víctima.
Se han buscado muchas respuestas al porqué de la violencia por parte del profesor, pues normalmente un profesor debe de caracterizarse por su gran paciencia y compresión. La violencia puede provenir de dos lados: la inexperiencia y desesperación del profesor al ver a sus alumnos descontrolados; o la violencia por parte del alumno hacia el profesor, que posteriormente podría poner al profesor en una actitud defensiva y tratar de maltratar o asustar al alumno.
La hipótesis que se aprueba más es la de la violencia por parte del alumno y luego por parte del profesor. Si bien la educación familiar ha decaído, lo único que se espera es que el colegio logre enderezarlos, pero muchas veces el profesor recurre a esas medidas por un “contagio” del alumno que vive en un ambiente violento. Normalmente los actos violentos del alumno suelen ser verbales como ignorar, insultos, amenazas, respuestas malhumoradas o acompañadas de burlas. Éste tipo de agresión suele afectar al profesor, al perder la paciencia o empezar a ser injusto o “malo” ante los alumnos, posteriormente, si el profesor no ve un cambio por parte de los alumnos, podría llegar a la violencia como un tipo de amonestación sobre el comportamiento de los alumnos, que luego sería una costumbre, es decir, el docente los trataría así como si fuera algo común y corriente.
Éste tipo de violencia en las instituciones afecta en sobremanera al alumno. Además de afectar de manera física al alumno, obviamente causando lesiones, la parte que estaría más afectada sería la parte emocional y sicológica, bien por un mismo maltrato hacia su autoestima o por un trauma debido al maltrato físico. El alumno podría convertirse en un ser sumiso y asustado en cada vez que vaya al jardín o al colegio, desahogándose en su entorno familiar o con sus amigos, las características más resaltantes son: arranques de rabia, actitud rebelde, desinteresada y resignada, usando la violencia frente a su entorno.
La violencia hacia los alumnos por parte de un profesor, puede ser tan traumática como la violencia por parte de los padres de familia. Se sabe que dicha profesión los es la más fácil de todas, pero cada persona que la ejerce debería tener muy claro en mente que ellos determinarán una gran parte del futuro de sus alumnos.
Autor:
SACHÚN SILVA, MARLON.
En el tercer párrafo del artículo denominado: VIOLENCIA INFANTIL POR PARTE DEL DOCENTE, dice: Si bien la educación familiar ha decaído, lo único que se espera es que el colegio logre enderezarlos…
ResponderBorrarNo hay que dejar de lado la educación en el entorno familiar que se le brinda al niño. Si en la familia existe violencia tanto por los padres como por los hermanos, entonces dicho niño, en sus primeros momentos de desarrollo, muestra repercusiones negativas en sus capacidades de interrelación y en su autoestima. Así como también en los jóvenes, se puede observar: hiperactividad o aislamiento, bajo rendimiento académico, deficiencias intelectuales, fracaso escolar, problemas de relación interpersonal. Todos estos problemas se ven reflejado en el jardín o en la escuela a través del mal comportamiento del niño o joven estudiante, el cual ocasiona una serie de problemas tanto para su formación académica como en su propio comportamiento que son soportadas “desgraciadamente “por el profesor.
Por tal motivo para disminuir la violencia en las aulas, a las personas se les debe dar una buena educación en el entorno familiar, inculcando valores, buenas conductas, etc., desde niño.
Ya que el colegio no va a lograr enderezar a los niños, si es que no va de la mano con una buena formación en el entorno familiar; ni mucho menos un solo profesor puede educar a todos sus estudiantes.
Marvin Arriola Vásquez
Estoy totalmente de acuerdo contigo, la disciplina de los niños está relacionada con su entorno familia, y también a su entorno en el colegio. Como se había citado anteriormente, que la educación familiar ha decaído. Pues siempre y obviamente sabemos que los padres de un niño siempre quieren ponerlo en un colegio donde le den una "buena formación", no solamente académica, sino también moral. Los padres encuentran una esperanza en la instrucción del colegio, que se supone que lograrían formar al alumno en buena manera a su hijo. El profesor, como dice en el artículo, siempre va a ser guía para el futuro de cada alumno, no logrará educar a todos, ya sea por factores familiares o simplemente la indisposición del niñ@ por cambiar, pero sí logrará influenciar o cambiar la mentalidad de un niño, positiva o negativamente.
ResponderBorrarDebemos tener presente que todo comportamiento de un niño sea positiva o negativa, lo tenemos que ralacionare con la formación que tiene este en sus hogares, lo cual se demostrará, en la vida diaria, tanto con sus amigos y en la escuala. Muchos dicen que en la escuala deben enseñarles a comportarse, pero en la escuela solo van a adquirir conocimientos cognitivos no actitudinales, ello se obtiene del hogar, lo cual se debe reflejar en la escuela.
ResponderBorrarPor otro lado,respecto a la violencia de los maestros, esto ocurre siempre y cuando los alumnos(niño) demuestren malas actitudes, o se comporten de una manera incorrecta, es ahi cuando el maestro pierde la paciencia lo cual la violencia es su consecuencia. Si este niño tuviera buenas costumbres desde su hogar no existiera ningun motivo para que su maestro haga práctica de la violencia frente a este, en el caso que no sea así se deben tomar medidas tajantes frente a ello.
Mi hermana que tiene 11 años está en 6to de primaria del colegio Antonia Moreno de Cáceres de Mariscal Cáceres me ha contado que su profesor maltrata a sus alumnos física y psicológica. Quiero encontrar la manera de ayudarla y temo por la salud mental de sus compañeros.
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